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La vieja Europa

6 de mayo del 2003

Pobreza en Europa

Juan Francisco Martín Seco
La Estrella Digital

Los estruendos de la contienda difícilmente nos han permitido prestar atención a otras cuestiones más prosaicas y doméstica. Efectos colaterales también de las guerras. Éstas sirven de cortina de humo a los problemas sociales y económicos..
Hace ya algunos días que Eurostat publicó un estudio sobre los índices de pobreza en los Estados miembros, concluyendo que el 15% (aproximadamente 56 millones de personas) viven en Europa en esta situación..
Lo primero que conviene aclarar es que el concepto es relativo ya que se calcula en función de la renta media. No de la europea, sino de la de cada país; con lo que se puede dar la circunstancia de que alguien considerado pobre en Suecia o en Alemania disponga de más renta que otros que no tienen tal condición en Grecia, Portugal o España..
El estudio señala también para cada país el efecto que sobre el índice de pobreza tiene la actuación estatal mediante transferencias sociales..
Una vez más se pone de manifiesto, hasta en la forma de elaborar las estadísticas, la falta de cohesión social en la Unión Europea. Ésta, por más voluntarismo que algunos adopten y pronunciamientos triunfalistas que realicen, no pasa de ser un mercado más o menos unido, y a la hora de la verdad, de la distribución de la renta, cada país tiene que apañarse por sí mismo..
Tal falta de integración contrasta con la dinámica frenética de ampliar más y más sus límites geográficos, incorporando nuevos países. Ya hemos llegado a veinticinco. Aplicando a la Unión Europea los atributos que la lingüista define para los conceptos, diríamos que gana en extensión lo que pierde en comprensión..
Pero retornando al tema de la pobreza y a las cifras del Eurostat, la comparación del porcentaje entre países resulta ser una aproximación al grado de desigualdad con que las rentas se reparte en cada uno de ellos, y en especial la mayor o menor intensidad que también en cada uno de ellos tienen las políticas sociales para corregirla..
Curiosamente los países más pobres de la Comunidad son también los que distribuyen peor la renta, presentando tasas más altas de pobreza relativa (Grecia y Portugal 21%, España 19%)..
En el caso de nuestro país, lo que tal vez sea más significativo es que este elevado índice de pobreza obedece al escaso efecto de las transferencias sociales, puesto que si bien éstas reducen por término medio en Europa el porcentaje en nueve puntos, en España sólo lo hacen en cuatro. Únicamente en Grecia (un punto) y en Italia (3 puntos) la política social tiene un impacto tan reducido..
Tales datos concuerdan con la participación que el gasto de protección social tiene sobre la renta nacional. En nuestro país es del 20%, el menor de todos los países excepto el de Irlanda y siete puntos inferior a la media europea. Existe además el agravante de que este porcentaje se ha reducido en dos puntos desde 1996. Después el gobierno dirá que hemos crecido más que la media de los otros países, pero da la impresión que ese crecimiento económico no llega a todos.