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Argentina: La lucha continúa

La niñez en la mira, hija de trabajadores desocupados:

Miriam Tasat / Resumen Latinoamericano

 

En la zona de la Estación de Constitución podemos escuchar a diario voces de niñas, niños y adolescentes trabajadores. Ellos nos hablan de las terribles circunstancias que a diario deben enfrentar en virtud de su trabajo cuasi exclavo, brutalmente alejados de las consideraciones de los expertos. El trabajo infantil, en virtud de las relaciones sociales que impone el capitalismo, debe ser desterrado definidos como en sus peores formas o en sus mejores formas.
Para los expertos en infancia de las corporaciones multinacionales no todo trabajo infantil es nocivo. Aunque implique dejar 12 horas diarias de trabajo en la infancia y se realice para obtener ingresos que permiten la sobrevivencia familiar, grupal o individual. La sobrevivencia no es otra cosa que obtener el alimento cotidiano, la vestimenta, el calor que ahuyenta el frío ,el techo refugio que nos contiene y tal vez algo de juego o recreación.
Los voces de los trabajadores infantiles en la zona de Constitución, parecen querer gritar otra realidad. Escuchémos sus relatos: Al observar la realidad laboral de estos niños observamos que por lo general se dedican al pedido de monedas en las boleterías internas y externas de la estación, por lo general supervisadas por un mayor; al pedido de comida, cartón , diarios o chatarras en comercios y casas al pedido de cartón en comercios; a la recolección de residuos, papel, cartón, latitas, telas y al ejercicio de la prostitución o el hurto.
Los adolescentes mujeres o varones denuncian en sus relatos de manera frecuente la muerte en la estación Constitución de bebes. Las causas de muertes enunciadas fueron, frío, humo de los trenes, mueren aplastados por los padres cuando todos se quedan dormidos, se atragantó con flema .
Los trabajadores infantiles en edad escolar que trabajan pidiendo monedas en las boleterías que permanecen en la estación entre 12 y 13 horas, por lo general dicen ir al colegio y hacer una comida en él. En este grupo existen algunos niños habidos de estímulos, por lo general son niños de familias que salieron a trabajar en la calle no hace mas de 8 meses . Por ejemplo, estos niños buscan en la basura revistas para leer.
Las formas alternativas de sobrevivencia buscadas por los adolescentes trabajadores, a partir de los 10 años, se relacionan con la prostitución .
Si bien hace rato que se observa esta alternativa de trabajo, asombra ver la magnitud que está alcanzando. Existen niños travestis , niñas prostitutas, adolescentes prostituidos que son incorporados a redes que transitan en distintos barrios de la Ciudad de Buenos Aires.
Si el niño trabajador permanece con un mayor a su lado concurre al hospital en los casos que la enfermedad ya está establecida o si la urgencia de un accidente se lo impone . Es revelador el siguiente testimonio de una señora de 19 años venida de Tucumán para atender a su bebe con pronostico de encefalitis e hidrocefalia; ya que nos acerca a las redes invisibles que sostienen el derecho a la salud de los pequeños trabajadores. Está mamá tucumana comentó que se vino para tener un pronostico mejor y para esto lo voy a atender en la Casa Cuna. La señora pudo realizar el viaje de Tucumán hasta la Ciudad de Buenos Aires pues desde aquí se le envió el dinero. Este dinero fue obtenido con el trabajo de casi 12 horas diarias de niños y adolescentes trabajadores que piden monedas entre los coches de Constitución. La plata para la vuelta será recolectada de la misma manera.
Queda claro sobre que hombros recae la salud pública...
Las enfermedades mas padecidas y relatadas por los pequeños y jóvenes trabajadores fueron : sida, bronquitis,broncoespasmo pulmonía, sarna, piojos, crecimiento lento. anemia, desnutrición . No engordo, no crece, esta muy flaca, estoy amarilla y con tos, fueron algunas de las frases escuchadas. Se citan recurrentemente muertes de madres y niños infectados con sida. La prostitución de niños y niñas en relación con el el sida parece una incógnita al indagar si es posible que un niño pueda cuidarse frente a un adulto.
La desvastación del hambre, en el caso de adolescentes que poseen hogar y que no quieren prostituirse o robar, parece hacerles transitar privaciones al limite de la fuerza corporal :"hoy me estoy cagando de hambre igual que mi mamá, vine sin comer son las 13 horas y me quedo hasta 12 de la noche o 01 de la madrugada". Este relato fue de una adolescente mujer de 13 años.
Hacía un mes había muerto su padre de sida en el Muniz . Mientras transitábamos la entrevista, la adolescente pega un grito y me explica : "al ver a un señor comiendo una fugaza con queso grité del hambre que tengo".
La madres de los niños denuncian a los policías que frecuentemente les hacen firmar papeles con contravenciones y que pueden , en su acumulación, ser prueba para instruir a la justicia por alguna demanda contra los padres de los niño .Para sacarte a los chicos, para que no vengas mas a Capital desde Provincia de Buenos Aires parecen ser los razonamientos acertados de esta población que sufre otra estrategia de limpieza contra los pobres de la Ciudad de Buenos Aires y contra los pobres que llegan del cono urbano.
Fue recurrente escuchar la preocupación de las madres con respecto al peso de los chicos y de ellas misma . Una mamá que buscaba leche en un comedor pues en las salitas no están entregando nos contó pesaba 56 ahora estoy en 48 kilos, estoy perdiendo mucho peso, al nene lo llevo al control médico para que le miren el peso y lo midan, la maestra los peso y midió y desde ahí tengo que controlarla. Está muy chiquita.
Múltiples familias habitan la estación de Constitución y trabajan en la misma. Los organismos como Programa sin Techo dependiente de Promoción Social- GCBA contesta ante esta problemática que estamos desbordados.Un grupo de señores que viven en en la estación comentaron que llamaron a un programa social del GCBA Buenos Aires Presente para pedir frazadas y se les contestó que ya no había frazadas pues todas se habían enviado a Irak y a la Ciudad de Santa Fe.
Las familias desnutridas en grados preocupantes a simple vista que habitan en los hoteles dependientes del Gobierno de la Ciudad parecieran ser visibles solo para la muerte.
La preocupación por parte de los adultos por la experiencia de niños varones a los cuales se les invita a comprar zapatillas y desaparecen varios días es escuchada tanto por madres como por niños valientes. Hubo casos que fueron denunciados en la comisaría de la zona y luego los denunciantes, por lo general un familiar del niño, sufrieron reprimendas: golpes, amenazas, pérdida de la documentación y de la parada donde trabajan.
Es importante el número de padres de trabajadores infantiles del Gran Buenos Aires que no perciben el plan jefe de familia aún habiéndolo peticionado hasta cuatro veces. Una señora comentó como le llego una carta a su casa luego de la cuarta vez de peticionarlo.
La carta le informaba que no le daban el plan por poseer una acopiadora de hierro y chatarra; demás está decir que la acopiadora no es mas que un lugar donde juntan los residuos a reciclar.
Las niñas, niños y adolescentes, trabajores infantiles no son la imagen del infierno en la tierra de la cual sólo se puede huir o contemplar, son hijos de trabajadores desocupados,son la cristalización de la clase mas castigada , son pequeños trabajadores que arrastran con su cuerpo el país que supimos construir.